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Guys, this banana bread. Oh, my gosh, this bread!

 Empieza otro fin de semana y qué mejor que hacerlo cocinando una receta fácil y deliciosa. ¿Quién dice que no a un trozo, o dos, o tres de brioche francés con gianduja y albaricoque confitado? 

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Hay quienes durante el fin de semana aprovechan para salir de casa y hacer un montón de cosas, desconectar, estar con los amigos, ir a comer fuera… pero hay otros que prefieren quedarse en casa para relajarse y disfrutar de las pequeñas cosas con los suyos. Nosotros tenemos fines de semana de todo, a veces nos apetece recorrernos 100kg sólo para ir a comer una paella, pero hay otros que deseamos apagar el móvil y quedarnos en casa haciendo otro tipo de cosas, en mi caso: cocinar.

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Como ya os dije en mi perfil de Instagram, esta vez quiero compartir con vosotros una receta muy fácil pero que da un resultado fantástico. Esponjoso, dulce y apetecible en muchísimos momentos del día.

 

Ingredientes brioche

500 gramos harina de fuerza 

10 gr de sal gruesa 

60 gramos de azúcar 

6 huevos ecológicos

250 gramos de mantequilla (pomada)

*albaricoque confitado (opcional)

 

Ingredientes ara la gianduja casera 

300 g de chocolate con leche para repostería 

200 g de avellanas tostadas 

200 g de azúcar glas 

20 ml de aceite de girasol

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Preparación 

 

En un bol poner la harina, la sal, el azúcar y la levadura y mezclar para que los ingredientes se unan. A continuación ponemos nuestra mezcla seca en un robot de cocina (este paso no es necesario si lo haréis a mano) y añadimos 3 huevos. Amasamos a velocidad lenta hasta que los huevos se hayan integrado. A continuación, añadimos los 3 huevos restantes y volvemos a amasar hasta que la masa quede muy elástica. Para saber cuando la masa esta lista, tenemos que ver que ésta no se pega a las paredes, aproximadamente serán unos 10 minutos. Llegados a este momento, añadimos la mantequilla pomada y volveremos a amasar hasta que la masa absorba toda la mantequilla.

 

Cogemos nuestra masa y la dejamos en un bol suficientemente grande y la tapamos con papel film durante 1 hora. Romperemos la fermentación. Pasado este tiempo, la dejamos 12 horas en la nevera. 

 

Mientras nuestro brioche esta en reposo, prepararemos nuestra gianduja casera. En el vaso picadora ponemos las avellanas tostadas y trituramos hasta hacerlas polvo, entonces incorporar el azúcar glas y el aceite. Seguimos triturando hasta que los ingredientes se unifiquen. Poco a poco veréis que obtenemos una pasta que un fuerte sabor a avellanas. 

 

Fundimos el chocolate y lo añadimos a la mezcla de praliné. Removemos para que se integre por completo y lo dejamos templar en la nevera. Cortamos trozos de albaricoque confitado y reservamos. 

 

Pasado el tiempo de reposo, sacamos la masa de brioche de la nevera y dividimos la masa en 6 tiras del mismo peso para poder hacer las trenzas. Nos saldrán 2 coronas, así que necesitaremos 6 tiras. 

 

Cogemos un trozo de masa y lo estiramos en forma de churro, lo aplastamos un poco. Sacamos la gianduja y extendemos una capa fina. Añadimos los trozos de albaricoque, plegamos y volvemos a hacer un churro para que nuestro relleno este en el interior. Repetimos el proceso. Con tres de nuestros churros rellenos y empezamos a trenzar hasta que juntamos el inicio con el final dándole una forma de corona trenzada. Horneamos a 180º (masas de 250 a 300 gramos) unos 15 minutos aproximadamente. 

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Una vez tengais vuestras coronas listas, solo hará falta emplatar y comer.

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